Mi amigo es narcisista! ¿Qué hago?



¿Conoces a alguien que siempre se las arregla para cambiar el rumbo de la conversación hacia sí mismo? ¿O siempre presume de tener el último_______? ¿O quien piensa que es más inteligente y mejor que los demás en todo?

Solemos llamar a estas personas narcisistas.
Pero no siempre vienen con características tan obvias. Es posible tener algunos rasgos narcisistas sin tener un trastorno de personalidad narcisista (que es cuando el narcisismo comienza a impactar negativamente en la vida diaria y las relaciones).

El grado de narcisismo varía. No todos son llamativos y egocéntricos a primera vista como lo pintan en los medios.

El Dr. Keith Campbell, jefe del departamento de Psicología de la Universidad de Georgia y autor del libro: The Narcissism Epidemic: Living in the Age of Entitlement, explica que "la gente está en un continuum... hay un rango amplio de narcisismo. La gran mayoría de los narcisistas están en rango medio. Aunque algunos son más extremos que otros".

 De hecho, muchos son tímidos y tranquilos.

Al principio son queribles. Causan una primera impresión positiva. Pero con el tiempo viene el shock. Muestran sus verdaderos rasgos y no puedes creer que hayan cambiado o que sean realmente así.

¿Cómo reconocer si tienes en tu vida un narcisista y por qué debería importarte?

Para la persona narcisista típica, no eres más que una fuente de suministro narcisista (que le provee de todo lo que ella precisa o desea dentro de la relación).

Generalmente esas necesidades las malinterpreta como “emociones”. Estas necesidades emocionales otros suelen confundirlas con vulnerabilidad y apertura de corazón. Cosa que aprovecha muy bien actuando siempre de víctima.

Por eso, seguramente hayas pensado que tenías una amistad con esta persona.

Puede que te haya convencido de que se preocupa por ti, pero en realidad no cuentas para nada, ya que su mundo gira sólo a su alrededor y es la reina/rey de su universo. Aunque disimula esto y lo esconde de sus colegas, hermanos, pareja o padres.

Aunque hable aquí de amistades, esta persona no entiende la amistad como el resto lo hace.

Lo que hace es rodearse de conocidos a los que llama amigos. El individuo común puede llegar a pensar que son amigos, pero pronto se da cuenta de que la relación es unilateral dedicada solamente a las necesidades del narcisista. 
Cuando el amigo busca una relación recíproca, la persona narcisista se aburre rápidamente, y la relación termina abruptamente.
La persona narcisista se vuelve fría, remota, muestra desinterés. Y la amistad se esfuma para sorpresa del amigo.

Lo que el amigo no siempre comprende es que ha estado experimentando una relación utilitaria (la ausencia de una involucración mutua como amigos).

Algunas características:

1. Toda conversación gira a su alrededor.
Puedes contarle que necesitas un trasplante de hígado, y sin saber cómo terminarás hablando del auto nuevo que se compró.
Si te lo encuentras en medio de tu rutina, te preguntará “¿Cómo estás?”. Pero no te engañes que no es por interés, sino para poder luego dar pie a un monólogo de 25 minutos sobre sí. Y para no sentirse mal, terminará la conversación con un “deberíamos juntarnos a tomar un café un día de estos” (cosa que no sucede).

2. No toma en cuenta tus necesidades
Puede que te desvivas para apoyar a tu “amigo” cuando lo precisa. Pero al querer ese mismo apoyo te encontrarás con que “no tengo tiempo”, o una gran pared de indiferencia.

Tus necesidades quedan relegadas a segundo plano y según su apretada agenda. Si le “sobra tiempo” te escuchará (claro que se las arreglará para terminar hablando de sí mismo).

Si te escucha, notarás que deja de prestar atención muy pronto. Desde gestos faciales, mirar hacia cualquier lado, cambio de tema, falta de devolución sobre lo que se habla (no un "ajá") o no contestar. 

Muy pronto aprendes a no hablar de ciertas cosas que no estén en el ámbito de intereses del narcisista (incluido tu mismo!), porque no puedes sostener un diálogo de otra forma.

3. Todo gira en torno a sí mismo.
Puede ser que no sepas nada de él o ella durante una semana (semanas, o meses!) y de pronto vendrá para ponerse al día contigo. “Como estoy libre hagamos esto”.

No siente la necesidad de cultivar una relación. O de preocuparse genuinamente por el otro.


Es como si tuviera un estante lleno de conocidos a los que les pega la etiqueta “amigos”.

Y los escoge según la necesidad que tenga ese día. 

Luego de usarlos los vuelve a colocar en su “estante” hasta nuevo aviso.

Es muy raro que te pregunte por su propia cuenta sobre tu vida personal o emocional (salvo que tenga un interés personal para él, haya algo que puede ganar con la información o como introducción para poder hablar de sí mismo).

4. Detestan profundamente las críticas.
Aunque creo que nadie puede decir honestamente que le guste recibir críticas, las personas con narcisismo son hiper-sensibles a ellas.
Recibirlas puede hacerlos estallar en una crisis de llanto, ira, o nervios.

5. Son expertos en poner excusas
Si estabas esperando una disculpa, quédate sentado. Porque los narcisistas externalizan la culpa, culpando a todos menos a sí mismos. No se hacen cargo de los errores que han cometido.

6. Todo es personal
Sobre todo en narcisistas tranquilos o introvertidos, puede que no veas ningún signo de auto-promoción. Pero están a la defensiva y reaccionan con enojo si las cosas no salen como quisieron o no los reconocen como creen es debido.

Es más, si haces algo que al narcisista no le gusta, para él/ella significará que estás en su contra o que no lo entiendes.

Cuando estás en este tipo de relación y comprendes que estás siendo usado, puede que estés tentado a confrontar al narcisista.

Hablarás de lo injusto de la situación. Y si tienes suerte te dirá “Claro, claro, te entiendo”. O “no fue mi intención”. Incluso un “estás mal interpretando las cosas”. Pero si crees que realmente toma en cuenta tus sentimientos, te equivocas.

Como todo gira alrededor de él/ella, piensa que tiene derecho a todo pero no siente la necesidad de dar nada. Así que, ¿por qué debería cambiar?

Seguramente terminará la relación diciendo que no lo/la entendías, que eres egoísta, desalmado, o que lo envidias.  No habrá auto-reflexión, porque es incapaz de hacer empatía genuina contigo.

De hecho, el narcisista no comprende como el resto que hay diferentes grados de amistad (no se pasa de "desconocidos" a "mejores amigos" sólo porque le asigne ese papel a alguien). 

No entiende o no le interesa entender el mecanismo de la amistad. Por eso es que cree que estás rechazándolo cuando le dices que sientes que no le interesa cultivar la amistad.

Para él/ella todo está perfecto mientras hagas lo que pida. La relación le sienta perfecto así como va.


7. Celos constantes:

Carlos Jorge explica: “Los celos que podríamos denominar neuróticos son aquellos que constituyen una característica permanente en la persona y que hacen que no puedan incubar un amor autentico, porque todas sus relaciones están atrapadas en una imparable necesidad narcisista.”

Lo cierto es que sin una inversión emocional en la otra persona, lo normal es que la relación termine por marchitarse. 
Cuando esto sucede, vive el fin de la relación como rechazo.  Cosa que no puede tolerar en lo más mínimo.
Por eso, al primer signo de “rechazo”, cortará la “amistad” para ahorrarse los intolerables sentimientos de abandono y angustia que no puede tolerar en ninguna relación.

Por eso, debes entender que no es por algo que hayas hecho, sino porque responde a algunas cosas con extremo miedo al abandono (cosas que no tendrían mayor importancia para una persona sana).
Cuando la relación termina, el narcisista irá en búsqueda de otra fuente de suministro narcisista y el ciclo comienza de nuevo.

Pero, ¿cómo puedo saber si mi amigo/a es narcisista?             

Piensa detenidamente estas preguntas:

1. ¿Hay reciprocidad en la relación? ¿O es siempre un dar y tomar donde uno sólo siempre es el dador y el otro siempre recibe?

2. ¿Eres capaz de ser tú mismo en la relación? ¿Encontrás que tenés que ocultar algunos talentos o logros para que tu amigo no se sienta amenazado o triste? ¿O tu amigo celebra contigo y te inspira a ser mejor?

3. ¿Pueden ambos ser vulnerables y discutir sus sentimientos?

4. ¿Confías tus sentimientos a esta persona o estás en guardia la mayor parte del tiempo? ¿Han sido usados tus sentimientos en tu contra?

5. ¿Tu amigo puede empatizar contigo a nivel compañero?

6. ¿Tu amigo saca a brillar lo mejor de ti? ¿Puedes ser tu verdadero yo, en tiempos buenos y malos?

7. Cuando hay cosas que tienen que discutirse, este amigo ¿se hace cargo de sus propios actos y decisiones?

8. ¿Encuentras aceptable tener límites con este amigo? Cuando tratas de poner límites, ¿causa problemas en la relación? ¿O es comprendido y pueden hacer que funcione?

9. ¿Se preocupan acerca del otro como persona, más allá de lo que hacen cuando están juntos?

10. ¿Tu amigo te usa para su propio beneficio? ¿O valora lo que tienes para aportar a la relación?

Si te sientes usado, no escuchado, agotado, no tenido en cuenta, o no respetado… presta atención! Son los síntomas de estar en una relación tóxica.

Probablemente sientas enojo por no haberte dado cuenta antes y culpa al querer dejar esta relación.
Recuerda que el narcisista juega con tu mente. 
No sólo culpan a otros de sus actos y problemas, sino también son muy buenos en hacer que otros acepten la culpa. 
Parte de lo que sientes es lo que el narcisista ha plantado en tus pensamientos.


Pon límites claros y rechaza la culpa.
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